Capitán de la nave: "Primero pensé que habíamos chocado con una ballena"
El sueco Bengt Wiman (49) narró a medios de su país cómo se vivió en el crucero el momento del accidente.
Pasajera argentina también relató detalles.

24 Nov 2007
"A las 11.30 comprendí que algo no andaba bien. Primero pensé que habíamos chocado con una ballena. Luego, por la radio, escuchamos que había desesperación en el barco", relató el capitán Bengt Wiman (49) a los medios suecos sobre el momento en que el crucero que comandaba, el MS Explorer, chocó con un iceberg en las cercanías de la isla Rey Jorge, en el estrecho de Bransfield.

La madrugada del viernes el barco se encontraba atravesando por un sector de masas de hielo, pero se encontraban a unos siete metros de llegar a agua limpia. "Cuando de repente sonó la alarma de una habitación que estaba casi al medio del barco. Comenzamos a buscar el forado, lo encontramos bastante rápido y era un poco más grande que un puño. Entonces lancé la alarma y logré que todos los pasajeros se levantaran".

Luego, según el testimonio del capitán, la tripulación comenzó a sacar con bombas el agua que entraba rápidamente por el bache, pero la labor se vio interrumpida a los pocos minutos, cuando se quedaron sin electricidad.

Según Wiman, no está claro qué ocasionó el impacto . "Probablemente algún pedazo de hielo que era más duro que otros". Luego de la alarma inicial, logró sacar a la embarcación del área de témpanos, pero luego comenzó a inclinarse. "Entonces me vi obligado a ordenarles a todos que abandonaran el barco". El y 15 tripulantes se mantuvieron a bordo, tratando de retomar el control de la máquina. Lograron que los motores encendieran de nuevo, sin embargo, la inclinación del barco se acentuó. "Entonces yo también decidí abandonar el barco, como último hombre".

"Cuando al fin logré bajar al bote salvavidas nos sentamos y comenzamos a abrazarnos", narró el capitán sueco, quien se sintió muy satisfecho sobre cómo lograron evacuar a todos los pasajeros. "La operación de salvamento salió muy bien, casi como sacada de un manual".

En tanto, una de las tripulantes del crucero, la argentina Andrea Salas (38), relató ayer a una radio transandina cómo se vivió el choque con el iceberg. La mujer, que trabajaba como asistente de la expedición, contó que sentir golpes en el barco durante la travesía era normal, pues se navegaba en zonas con masas de agua congelada. A la hora de la colisión ella se encontraba en el bar de la embarcación junto a otros colegas, cuando vieron que había gente que subía desde las cabinas de los pisos inferiores, mojados y gritando: "¡Hay agua!". Minutos más tarde, por los altavoces se anunciaba que el barco había chocado con una formación de hielo.

Sin embargo, la tripulante confiesa que "quedamos sorprendidos, porque hubo una paz y un comportamiento súper bueno de los pasajeros, que no 'paniquearon' y se quedaron controlados todo el tiempo", aunque las bajas temperaturas se hicieron sentir mientras estaban en los barcos salvavidas, donde estuvieron cerca de cuatro horas.

"Hacía mucho frío, y si bien estábamos muy abrigados, como permanecíamos quietos y nos mojamos, obviamente hacía mucho frío", relató.

El sueco Jonas Hellman, de 17 años, contó a los medios de su país haber recibido un dramático llamado de su hermana, quien iba a bordo del barco en compañía de su novio. "Fue un shock enterarnos de esto. Mi hermana me llamó y me dijo que el barco se estaba hundiendo". Ingritt, su madre, contó que la pasajera les había enviado un correo electrónico y que estaba muy contenta, porque pensaba que el viaje sería "muy entretenido".

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23 Nov 2007
Los 154 tripulantes del crucero Explorer ya desembarcaron en la base Frei en la Antártica chilena, que anoche chocó con un iceberg y se hundió en la Antártica chilena. La Fuerza Aérea de Chile (FACh) dispuso de un avión C-130 Hércules para trasladar -se estima en unos tres viajes- a los afectados hasta Punta Arenas.

De los tripulantes del barco, 84 serán alojados en las bases chilenas Presidente "Eduardo Frei Montalva" y Profesor "Julio Escudero", mientras que el resto fue derivado a la base Artigas de Uruguay. El mal tiempo reinante en la zona donde naufragó el crucero turístico Explorer tras chocar con un iceberg a las 23:50 horas de anoche, retrasó el traslado de los 154 pasajeros y tripulantes que fueron rescatados sanos y salvos por el buque noruego Nord Norge, en una operación coordinada por la Armada de Chile.

Así lo confirmó a La Tercera Online el Comandante Rodrigo Vattuone, jefe de prensa subrogante de la Dirección General del Territorio Marítimo y Marina Mercante (Directemar), organismo encargado de los operativos de búsqueda y rescate en las aguas jurisdicionales chilenas donde ocurrió el incidente. Del total de rescatados 84 de ellos serán alojados en tres lugares de la base chilena: el gimnasio, la hostería y la base Escudero.

La intendenta de Magallanes, Eugenia Mancilla, informó que seis de los 154 pasajeros afectados por el naufragio del barco Explorer se encuentran con síntomas de hipotermia leve, por lo que se dispusieron todos los operativos necesarios para esperar a los afectados en las bases antárticas que los aguardan. "Hemos coordinado con todas las instituciones de salud pública que esta dispuesta en estos momentos para la llegada de estos pasajeros, en la eventualidad que requieran asistencia inmediata", señaló Mancilla.

Por otro lado, según un comunicado de la Tercera Zona Naval, elRompehielos VIEL informó que aproximadamente a las 15:30 horas de hoy, en latitud 57º 15’ sur y longitud 062º 24´weste, se produjo el hundimiento del MN Explorer. El Viel intentará rescatar algunos restos y balsas que se encuentran a la deriva, objeto no generen confusión ante nuevos avistamientos por parte de otros buques que navegan por el sector. Posterior al hundimiento se apreció una mancha de petróleo de 180 por 20 metros aproximadamente, la cual está siendo dispersada mecánicamente por el Viel.

Vattuone explicó que la alerta de la emergencia fue recibida a las 00:25 horas por lo que inmediatamente "activamos el Centro de Búsqueda y Rescate Marítimo" pues "dentro de nuestra area juridiccional está el territorio antártico y es una zona de responsabilidad nuestra, jurídica. Todas las acciones que ahí se desarrollen pasamos a conducirlas". En ese sentido, precisó que la Armada de Chile tiene a su cargo "el rescate de los pasajeros, la contaminación de las aguas, lo que pasa con el buque que tuvo el siniestro. Todo".

OPERATIVO DE RESCATE
Con respecto al operativo desarrollado durante la madrugada y que permitió el rescate en buenas condiciones de las 154 personas a bordo del crucero -entre las que no se encuentra ningún chileno-, Vattuone indicó que este se dividió en tres etapas que aún están en proceso. "La primera es el tema de la seguridad (...) En estos momentos todos los pasajeros y todos los tripulantes están a bordo. Cuando el capitán nos informó de la colisión con el iceberg, lo primero fue desviar un buque y fue el Nord Norge".

El Nord Norge, un crucero turístico, llegó a la zona del naufragio a las 6:45 e inició el rescate de los pasajeros del Explorer, de bandera liberiana, que permanecían en ocho botes neumáticos y seis balsas salvavidas en las cercanías del barco. La orden de abandonar la dio el propio capitán tras comprobar el impacto que se había tenido con el iceberg, lo cual provocó un forado en el caso que amenazó a la embarcación.

"Superada la etapa de búsqueda y rescate pasamos a una segunda fase que es la parte de hidrocarburos, y en esa etapa estamos, en el rastreo de toda la costa. Porque de encontrar la presencia de hidrocarburos tenemos que reaccionar. Tenemos elementos de combate a la contaminación de manera de poder atacarlo", agregó. Finalmente "en la tercera etapa está el tema de el resolver la condición de estabilidad del buque".

COMPAÑIA CONFIRMA NACIONALIDADES
La compañía de turismo Gap Adventures, propietaria del crucero, confirmó que fueron 91 pasajeros, 9 guías y 54 miembros de la tripulación las personas rescatadas hoy tras la colisión del buque contra un iceberg. Durante el transcurso de la jornada esa cifra se modificó varias veces, pero la emrpesa emitió un comunicado confirmando la cifra total, lo que fue confirmado por Susan Hayes, portavoz de la compañía con sede en Toronto.

En total el Explorer transportaba a 23 turistas británicos, 17 holandeses, 13 estadounidenses, 10 australianos, 10 canadienses, 4 irlandeses, 2 daneses, 2 belgas, 2 argentinos, 2 ciudadanos de Hong Kong, 1 suizo, 1 francés, 1 alemán, 1 japonés, 1 colombiano y 1 sueco. La nave tiene 73 metros de eslora y 14 de manga. Su peso es de 2.400 toneladas y fue construida en 1969 y reacondicionada en 1993. Al igual que otros 52 cruceros que tienen planeado circular por la zona, suele realizar travesías de dos semanas por la Antártida. Cada pasaje cuesta alrededor de 4.000 libras esterlinas (8.000 dólares) por cabina.

Fuentes del Instituto Fueguino de Turismo, con sede en la ciudad argentina de Ushuaia, confirmaron que en general el itinerario de estos cruceros "nunca es fijo" y que el Explorer tenía programado regresar a esa localidad el 8 de diciembre tras completar lo que ellos llaman un "Clásico Antártico Largo". Algunos de los lugares que tenía contemplado visitar eran Las islas Shetland del Sur, la Península Antártica, las islas Malvinas y las Georgias del Sur.

Ministra de Medio Ambiente: Se hace "inevitable" el hundimiento del crucero

La ministra del Medio Ambiente, Ana Lya Uriarte, dijo tener informaciones en orden a que se hace "inevitable" el hundimiento del crucero turístico Explorer, tras colisionar con un iceberg en aguas antárticas, al tiempo que se mostró preocupada por los efectos medioambientales que esto pueda acarrear.

"Tenemos noticias de que es inevitable el hundimiento de la nave y este es un tema que, naturalmente, preocupa desde un punto de vista medioambiental en cuanto a las consecuencias que podría tener. Estamos hablando de aguas gélidas con operaciones de rescate donde está descartado la presencia de buzoz tácticos, es decir, los mecanismos de rescate son muchísimos más complicados que en otras aguas que estuvieran más cerca del Chile continental", dijo la ministra Uriarte.

"Naturalemente, el acceso a la Antártica no es sencillo, de manera que están activados todos los dispositivos (...) de primeras investigaciones para determinar los efectos medioambientales de este fenómeno, de este accidente. Estamos en contacto con las autoridades regionales en la Duodécima región y con nuestro director regional de Conama". agregó.

La secretaria de Estado formuló estas declaraciones en el anuncio de nuevas medidas para proteger a las ballenas de la zona austral de Chile, tras el anuncio de Japón de iniciar una caza con "fines científicos" de mil ejemplares.
Fonte: La Tercera